¿Qué es la mentorización?
Por lo general, el concepto de mentorización o mentoría se aplica al campo del emprendimiento empresarial, donde empresarios de trayectoria sólida acompañan a emprendedores o directivos de una start up para asesorarles en el proceso de desarrollo de su proyecto empresarial.
No obstante, la figura del mentor también está presente en otras áreas: por ejemplo, algunas universidades cuentan con estudiantes veteranos que se encargan de mentorizar a estudiantes recién llegados e introducirlos en la vida universitaria para que no se sientan solos o perdidos en sus comienzos. También en el ámbito de la salud existen programas de ayuda entre iguales, especialmente cuando una persona acaba de recibir el diagnóstico de una enfermedad grave y se apoya en otra que ya lleva más tiempo con ese diagnóstico y, por supuesto, en la ayuda mutua respecto a las adicciones.
Volviendo al ámbito empresarial, la figura del mentor puede ser útil de una manera muy similar a la de los estudiantes veteranos en las universidades que hemos mencionado. Incorporarse a un nuevo puesto de trabajo en una empresa grande, donde los procesos son complejos y todo el mundo es desconocido puede hacerse de manera más eficiente si un mentor (un compañero ya veterano) acompaña al recién llegado durante su proceso de onboarding. Esto repercutirá muy positivamente en la experiencia de empleado del nuevo trabajador dado que optimizará su motivación, sentimiento de pertenencia e integración en su equipo, generando de manera eficiente mejoras en la productividad.
¿Quién realiza la mentorización? La figura del mentor
En general, podemos considerar al mentor como un entrenador que se sirve de su propio ejemplo y experiencia como herramientas fundamentales para promover el aprendizaje del mentorizado.
Idealmente la relación que se establece entre mentor y mentorizado debe beneficiar a ambas partes. Al margen de otras cualidades que deba desarrollar, el punto fuerte del mentor está en su experiencia precisamente en el área en la que el mentorizado precisa acompañamiento. De este modo, la otra pieza clave en la relación entre mentor y mentorizado, junto con la asimetría entre un principiante y un experimentado, es el nivel de reciprocidad que existe entre ellos. Esa relación en la que alguien experimentado comparte sus conocimientos con alguien recién llegado a ese ámbito en concreto es lo que permite el desarrollo mutuo.
¿Qué cualidades debe tener un mentor?
1. Escucha activa y observación activa
El mentor no puede conocer a la persona que tiene y, seguramente, tendrá delante durante un tiempo si no se toma la molestia de escucharla y observarla con atención antes de expresar opiniones o hacer indicaciones. Lo primero de todo es enterarse de quién esa persona, qué necesita, por qué ahora, porqué con ese mentor en concreto, cuáles son sus expectativas y, en definitiva, en qué punto de su proceso personal o profesional se encuentra.
2. Capacidad para el análisis crítico
El mentor debe ser capaz de captar al detalle el perfil del empleado para detectar sus habilidades y puntos de mejora. De manera paralela a la escucha y la observación, el mentor va procesando la información que recoge, ordenándola e interpretándola, de tal manera que pueda ir proporcionando al mentorizado las conclusiones a las que va llegando y asegurarse de que se están entendiendo mutuamente. Al final se trata de establecer un punto de partida del cual derivar objetivos a conseguir.
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3. Habilidades comunicativas
El mentor debe poseer capacidad para comunicar con eficacia su experiencia (puntos de vista, logros, aprendizajes). A ser posible, tiene que ser alguien agradable, que transmita solidez, empatía y paciencia. Pero también debe ser un buen comunicador, un transmisor generoso de sus ideas, ejemplos y experiencias de tal manera que el mentorizado sea capaz de inspirarse en los puntos de vista, logros y aprendizajes acumulados por la persona experimentada que tiene delante.
4. Diferenciar entre el mentorizado y él mismo
El mentor tiene que tener claros cuáles son las funciones y objetivos propios de su rol. De este modo, debe mantener una cierta distancia para no interferir inconscientemente en el proceso que el mentorizado necesita y puede realizar en este momento de su trayectoria. Se trata de ayudar al mentorizado a conocer, desarrollar e implementar su perfil profesional, no de convertirlo en una copia del mentor.
5. Apertura y flexibilidad
De manera transversal a las cualidades que acabamos de mencionar, la actitud del mentor tiene que estar definida por la apertura y la flexibilidad para adaptarse a las necesidades y características particulares de la persona con la que está llevando a cabo la mentorización. Eso le permitirá hacer los comentarios oportunos, imprimir el ritmo adecuado, animar cuando toque y sugerir límites cuando lo considere adecuado para el correcto desarrollo del mentorizado.
Principales funciones de la mentorización
Las funciones que debe cumplir un proceso de mentorización son múltiples y, sobre todo diversas: deben adaptarse a cada pareja de mentor y mentorizado en particular. No obstante, podríamos resumirlas en un esquema A-A-A:
–Acogida: recibir a la persona durante su proceso de incorporación a la empresa u onboarding o bien durante los primeros pasos en la creación de su proyecto empresarial.
–Acompañamiento: tiene lugar durante todo el proceso y se basa en el rol del mentor como referente en el que el mentorizado pueda inspirarse para tomar sus decisiones.
–Asesoramiento: se trata de toda la ayuda, orientación y consejo que, desde su propia experiencia, el mentor proporciona a la persona a la que presta su servicio de mentoría.
¿Cómo puedes beneficiarte de las ventajas de la mentorización?
La mentorización a los nuevos empleados o a los trabajadores de tus compañías colaboradoras no puede hacerse de cualquier manera. Para que sea un proceso exitoso, es importante promover un buen match (es decir, una óptima asignación de un mentorizado a un mentor concreto), entrenar habilidades de mentorización en las personas encargadas de llevarla a cabo y, por supuesto, integrar la mentorización dentro de la estrategia de gestión del capital humano, evaluación del desempeño y cuidado de la experiencia del empleado a través de la protección de su bienestar.
Ifeel dispone de un programa de bienestar mental para empresas, diseñado por su equipo de psicólogos expertos con el objetivo de ayudar a las compañías mejorar la experiencia como empleados que tienen sus trabajadores, tanto aquellos que se incorporan a las mismas como aquellos que ya llevan un tiempo formando parte de la plantilla.
A través de esta colaboración, los responsables de recursos humanos disponen de asesoramiento personalizado y basado en datos acerca de los principales factores de riesgo para lograr que los miembros del equipo, ya sean nuevos o veteranos, se sientan integrados en la empresa y puedan crecer y desarrollarse profesionalmente gracias al ejemplo de referentes que los acompañen en ese proceso.
Además, este programa de bienestar mental para empresas pone a disposición de los empleados un servicio de mejora de su salud mental estructurado en diferentes niveles según sus necesidades en cada momento a través de la app de ifeel. También pueden recibir soporte mental a través de un chat con uno de los psicólogos colegiados de nuestra plataforma. Si lo desean, pueden acceder una ayuda más continuada en el tiempo pueden acceder al tercer nivel del programa: la terapia psicológica online con un psicólogo especializado en casos como el suyo.
Esperamos que este post sobre qué es la mentorización, te haya resultado interesante, y te invitamos a leer nuestro blog sobre las funciones del Chief of staff. Contacta hoy mismo con nosotros y solicita más información sobre el programa de bienestar mental para empresas de ifeel.