Los problemas laborales a los que se enfrentan los trabajadores pueden ser muy diversos. No obstante, todos tienen algo en común: afectan en un grado u otro a su bienestar psicológico y, por tanto, a la productividad de la empresa.
En efecto, los problemas en el trabajo son muchos y podríamos clasificarlos por sus causas, sus efectos, su nivel de gravedad o el grado en que el empleado es responsable o no de padecerlos.
A continuación vamos a comentar con un poco más de detalle 5 ejemplos de problemas laborales a los que pueden llegar a enfrentarse los trabajadores de cualquier empresa.
5 ejemplos de problemas laborales que la empresa debe evitar
1. Desmotivación y aburrimiento
No siempre hay que buscar la causa de los problemas en el trabajo en circunstancias muy críticas o graves. A veces la fuente de malestar psicológico en el trabajador se encuentra en que se aburre profundamente llevando a cabo sus funciones. De hecho, cuando hay un mal ajuste de funciones, tareas y responsabilidades, el trabajador puede encontrarse realizando un trabajo tedioso, repetitivo, poco desafiante o poco desarrollador de su talento, con las consecuencias que eso tiene para su compromiso con la empresa y su autoestima. Puede ser, por tanto, un buen tema a detectar y abordar durante las entrevistas de evaluación de desempeño.
2. Burnout y estrés
Uno de los problemas laborales que más perjudican a la salud mental de los trabajadores es sufrir una situación sostenida de estrés laboral, por sobrecarga de trabajo, o bien directamente padecer un síndrome de burnout (“trabajador quemado”) debido a la saturación y la desmotivación profundas. Esto genera una gran distorsión en el compromiso del trabajador con la empresa y/o con la tarea y es una gran fuente de mala salud laboral.
3. Síndrome del impostor
Pocas cosas son tan agotadoras, incluso estresantes, como sostener una mentira. A veces, cuando trabajamos y caemos en un puesto para el que no estamos muy seguros de estar cualificados, o que no estamos muy seguros de que nos convenza, pero no tenemos más remedio que defender con uñas y dientes, caemos en una especie de “síndrome del impostor”. Más que trabajadores coherentes, parecemos actores interpretando un papel que no acabamos de creernos. El empleado vive entonces en conflicto con su identidad, su vocación y su trayectoria laboral. Esa enorme sensación de inadecuación acaba perjudicando seriamente su bienestar psicológico.
4. Falta de integración en el equipo
A veces los problemas en el trabajo vienen por el lado de lo social más que en lo que se refiere a la tarea. Muchas personas perciben en sus empresas un clima laboral frío que no estimula su sensación de pertenencia a la compañía. No necesariamente tienen tiranteces con sus compañeros de equipo pero sí una falta de conexión y complicidad, o comunicación deficiente con ellos, que les hacen percibir su equipo como poco cohesionado o bien percibirse a sí mismas como aisladas respecto al resto de trabajadores.
5. Malas condiciones laborales
Uno de los problemas laborales que mayor incomodidad causan en los trabajadores es el hecho de tener que trabajar en condiciones deficientes a distintos niveles: materiales (ordenador, mesa, silla, luz, temperatura, espacio), salariales (sueldo deficiente en relación con la carga de trabajo, la cualificación o la responsabilidad), de horario (desordenado, excesivo, ineficiente) o de conciliación (sensación insatisfactoria de que la faceta laboral “fagocita” a todas las demás). Las malas condiciones laborales dificultan el rendimiento óptimo, torpedean el compromiso del trabajador con la empresa y, por tanto, son un gran impedimento para la retención del talento.
Apuesta por el bienestar mental de la organización
Los problemas mencionados son solo ejemplos de aquellos que se presentan más comúnmente en las organizaciones. Sin embargo, no hay que perder de vista que son muchos más lo que podrían presentarse y agravar el clima laboral de las empresas, si no se atienden adecuadamente. Entre ellos podemos mencionar el mobbing o acoso laboral, los problemas de comunicación, el riesgo de acoso sexual en el trabajo, etc.
Por esta razón, y para hacerle frente a esta situación, ifeel desarrolló un programa de bienestar mental para empresas, diseñado por su equipo de psicólogos expertos, con el objetivo de ayudar a las compañías a evitar los principales problemas laborales que empeoran el bienestar psicológico de sus empleados.
Gracias a esta colaboración, los responsables de recursos humanos pueden recibir asesoramiento personalizado y basado en datos sobre cómo detectar los problemas en el trabajo que pueden aparecer en su compañía y prevenir que se conviertan en un obstáculo tanto para la salud mental de los empleados como para el rendimiento de la plantilla.
Por otro lado, el programa de bienestar mental para empresas de ifeel ofrece a los empleados un servicio de cuidado de su salud mental estructurado en diferentes niveles en función de lo que necesiten en cada momento.
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