Seguro que ya has oído que Eduard Punset (Barcelona, 1936-2019) ha fallecido esta semana a los 82 años. Fue una figura enormemente polifacética (¿sabías que fue ministro durante la Transición?) y cosechó una legión de seguidores, incluso fans de lo más entregados, gracias principalmente a su labor como “divulgador científico” en su conocido programa Redes. Televisión Española emitió este programa nada más y nada menos que durante 18 años, entre 1996 y 2014.
Punset también se granjeó no pocos detractores, que le afearon su deriva durante sus últimos años en activo más bien como “divulgador pseudocientífico”. Le acusaban de alinearse -o ser quizá indulgente- con temas más propios del folklore que rodea a la psicología y la salud que al verdadero rigor y profundidad que exige la ciencia.
Aplaudido o denostado, lo cierto es que Eduard Punset ha sido durante estos años un personaje tremendamente popular en España. De este modo, su nombre siempre estará ligado, de una manera u otra, a las ideas de ciencia, curiosidad y conocimiento.
Como imaginarás, 18 años de programa dan para mucho. Sin embargo, si hay un campo en el que Punset y sus colaboradores centraron sus contenidos fue el de la psicología y todo lo que esta abarca. Por eso, queremos comentar de manera resumida 10 temas sobre psicología en los que Eduard Punset tuvo ocasión de profundizar en su programa.
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1.Funcionamiento cerebral
Se trata de un ámbito bastante amplio dado que, al fin y al cabo, cuando hablamos del ser humano todo parece empezar y acabar en ese órgano aún tan desconocido pero fascinante que es el cerebro. Estimula tu cerebro para vivir más y mejor, ¿Cómo construimos los recuerdos? o Deporte para un cerebro más sano son solo algunos de los programas que Eduard Punset dedicó al funcionamiento del cerebro. El procesamiento de la información, las funciones superiores (memoria, atención y lenguaje, entre otras), enfermedades neurodegenerativas y todo lo referido a la evolución de la neurociencia centraron la atención del catalán.
2.La inteligencia y sus múltiples caras
El programa Redes también se ocupó del ámbito de la inteligencia en general, las llamadas inteligencias múltiples y su influencia en la educación, los trastornos del espectro autista o el funcionamiento a veces paradójico de las personas con altas capacidades (tradicionalmente denominadas como “superdotadas”). Qué es la inteligencia, hasta qué punto es posible medirla, en función de qué parámetros podemos afirmar que una persona es más inteligente que otra, son preguntas a las que intentó responder. La principal conclusión que intentó difundir es que existen diferentes tipos de capacidades que cumplen una función útil para la supervivencia y bienestar del individuo y que van más allá de su destreza matemática, por ejemplo.
3.Las emociones y sus misterios
Un programa como Redes, tan dado a abordar temas relacionados con la psicología, no podía eludir un campo tan importante como el de las emociones. Sin duda tuvo un interés particular en el pujante mundo de las emociones positivas, por ejemplo el optimismo o la cada vez mejor estudiada compasión.
Además, puso de manifiesto que las emociones no son únicamente nuestra parte visceral sino que tienen un impacto significativo en las decisiones que tomamos. Quizá lo que ocurre es que eso que llamamos pálpito, instinto, corazonada o intuición, y que no siempre sabemos describir en términos lógicos, son nuestras emociones guiándonos en una dirección determinada. Una dirección que, al menos en ese momento, juzgamos como la más correcta para nosotros. La psicología lleva décadas estudiándolo y, como el propio Eduard Punset afirmó con rotundidad, sin emociones no se puede vivir.
4.Amor, la lucha contra la soledad
¿Cómo es más probable que encontremos a nuestras parejas y en qué consiste lo que sentimos por ellas? Eduard Punset manifestó su asombro ante el amor como “uno de los instintos que ha permanecido más inalterable” a lo largo de tantos siglos de evolución de la especie humana. Concretamente habló de él como “Ese instinto de fusionarse con otro organismo para sobrevivir”. El amor es el impulso de conectarnos con otro ser ante la insoportable experiencia del miedo, la soledad o la inquietud y, de este modo, no ser ya más solo uno sino continuar el camino con un sentido de conexión, con un sentido del nosotros.
5.Felicidad, autonomía y estrés
¿Qué nos proporciona la felicidad, dar o recibir? Para Eduard Punset, aspectos como la salud, el dinero o el amor no eran factores decisivos para alcanzar ese estado que, en nuestra cultura, consideramos “felicidad”, aunque estén muy presentes en nuestras preocupaciones diarias.
También relacionó esa ansiada meta con la ausencia de un estrés excesivo y con no estar sometido al poder de (demasiados) otros que están por encima de ti y que toman decisiones que te influyen directamente o que te dan órdenes. Según Punset, para la felicidad es de gran importancia tener capacidad para decidir por uno mismo, ser autónomo, no estar a expensas del poder o las decisiones de otros. Eduard Punset llamaba a esto “ser dueño de uno mismo”.
6.Personalidad y genética
El divulgador catalán la examinó especialmente en lo que se refiere a su relación con la genética. De este modo, trató de comprender cómo nuestra conducta, nuestro estilo de afrontamiento ante los acontecimientos de la vida, incluso nuestra faceta más espiritual están mediatizados por el flujo de nuestros neurotransmisores, y tienen sentido en función de una serie de parámetros determinados por nuestra genética. Estos parámetros nos predisponen en unas direcciones u otras, aunque no conviene minimizar la importancia del ambiente en el resultado final de nuestra personalidad.
7.Las redes sociales y la psicología
Nuestras acciones tienen un impacto en los demás, de modo que muchas de las decisiones que tomamos tienen importancia para nosotros mismos pero también para otras personas. Todas aquellas con las que, de un modo u otro, estamos conectados, por muy aislados que creamos que estamos. Así, nuestra vida también consiste en estar en relación con otros, en contacto con otros, implicados en la vida de los otros o abiertos a que los demás se impliquen en nuestra vida.
Este hecho, lo queramos o no, es tremendamente influyente en la buena o mala vida que tengamos, porque también está relacionado con la cantidad y calidad de la información que recibimos sobre temas diversos. Es decir, con lo pequeño o grande que es nuestro mundo.
Por otro lado, Punset se interesó por el sentido de pertenencia de una persona a un grupo, así como por la probabilidad que tenemos de ser ayudados por otros en caso de apuro o la probabilidad -no lo obviemos- de ser agredidos. Todo esto tiene que ver con las redes en las que nos sentimos incluidos, lo cual alude también a las redes o grupos que nosotros mismos creamos deliberadamente.
8.El poder de la creatividad
La creatividad, tema del que ya hace tiempo que os hablamos en este blog, no escapó tampoco de la curiosidad de Eduard Punset. Esta capacidad tiene que ver con la importancia de ser conscientes de nuestros propios talentos, y poder así canalizar esa conciencia a través de muy variadas actividades.
Se trata de plasmar en esas acciones los múltiples resultados de nuestra inspiración, lo que puede ayudar enormemente a estructurar nuestra vocación. En el fondo, y entendida en un sentido amplio, la creatividad consiste en que nos expresemos más allá de la pura repetición, a través de la variación, del añadido, de la novedad que se nutre de lo anterior en una red más que en una cadena.
9.Los misterios de la psicopatía
Además de la ansiedad, la depresión o la conducta suicida, Eduard Punset y su equipo estudiaron el funcionamiento de las personas psicópatas. Según él y los expertos a quienes consultó, estos individuos cometen muchos más delitos y más variados que el resto de la población. Además, son personas que pasan muy desapercibidas porque su aspecto es el de cualquiera, lo cual aumenta la probabilidad de que puedan dañar a otros.
Como se expresó en uno de los episodios de Redes, los psicópatas saben que están actuando de un modo que la sociedad considera inadecuado. Es decir, que están haciendo cosas que no deben hacer, pero no sienten que deban obedecer las reglas. En este sentido, sí son capaces de ponerse en el lugar de otro a un nivel meramente cognitivo, ya que entienden lo que está sucediendo, pero no desde un punto de vista emocional. Los psicópatas no tienen en cuenta cómo se pueden sentir los demás, por eso no se preocupan de cómo repercuten sus acciones en los otros.
10.Diversidad sexual
La existencia de orientaciones sexuales no heterosexuales depende de diversos factores, principalmente de corte biológico y, en concreto, genético. Estos factores se han mantenido presentes a lo largo de la historia de la humanidad, lo cual resulta paradójico. Según las tradicionales leyes de la evolución, la no heterosexualidad debería haber desaparecido dado que los individuos homosexuales tienden a reproducirse significativamente menos que los heterosexuales, es decir, transmiten su herencia genética con una frecuencia muy inferior.
Sin embargo, la naturaleza no ha obrado como se esperaba de las leyes de Darwin y Eduard Punset se preguntó al respecto en el programa que dirigió durante tantos años. En cualquier caso, la genética no es tampoco el único factor que explicaría la homosexualidad. Por tanto, predispondría para ello pero no determinaría.
Riguroso o controvertido, en la carrera de Eduard Punset encontramos un claro mensaje dirigido al autoconocimiento, el desarrollo personal y, sin duda, a la salud física y psicológica del público en general. Es posible que leyendo este artículo hayas reparado en multitud de temas en los que te gustaría profundizar más allá de una lectura o un reportaje. En eso, como en otras cosas, consiste el trabajo de los psicólogos. Podemos orientarte en tu camino para concretar aquellas cosas que se despiertan en tu intuición y que todavía no has incorporado a tu vida cotidiana. No dudes en contactar con nosotros o hacernos formar parte de tu red, aunque sea durante un tiempo. Nos encantará acompañarte.
