Nuestra sociedad y la ciencia avanzan a pasos agigantados. Como resultado de esa evolución surgen diferentes modelos de familia como, por ejemplo, las familias homoparentales o las familias extendidas. Hoy vamos a ver uno de los nuevos modelos de familia, la “familia monoparental”, es decir, la familia compuesta por un único progenitor y su descendencia. Específicamente, vamos a hablar de las familias monoparentales creadas por una madre soltera por elección y su descendencia mediante el uso de técnicas de reproducción asistida.
Ser madre sin pareja es posible
Si echamos la vista atrás, veremos cómo muchas mujeres han afrontado la crianza de sus hijos en soledad sin haberlo planificado. Son mujeres que han tenido un hijo fruto de una relación de pareja estable o esporádica, donde el padre ha decidido ausentarse siendo ellas las encargadas de criar al niño. Este no es el caso de una madre soltera por elección. Estas, tras experimentar el deseo de la maternidad y no contar con una pareja estable masculina, deciden conscientemente recurrir a las técnicas de reproducción asistida para ser madres.
Los hombres sin pareja femenina que desean ser padres tienen que recurrir por fuerza a la adopción o a la gestación subrogada. Sin embargo, para las mujeres la opción de la reproducción asistida actualmente es legal e, incluso, en algunas comunidades autónomas está cubierto por la seguridad social. Este servicio nace de la necesidad de las mujeres sin pareja masculina de ser madres evitando que, como en tiempos pasados, se recurra a una aventura con un hombre para conseguir el embarazo.
Perfil de la madre soltera por elección
Maria Brichette, psicóloga especialista en reproducción asistida, describe en el Manual de intervención psicológica en Reproducción Asistida de 2012 el perfil de estas mujeres de la siguiente manera: solteras por elección, de entre 30 y 45 años de edad, que eligen voluntariamente la maternidad en solitario, siendo autónomas e independientes, con gran equilibrio emocional, empleo cualificado y residencia en grandes ciudades cerca de la familia de origen.
En la mayor parte de los casos, estas mujeres han pospuesto la maternidad por su crecimiento profesional o por no encontrar una pareja que considerasen adecuada para tener un hijo. Aunque no contamos con datos estadísticos en España sobre el número de madres solteras por elección, según el Informe estadístico de técnicas de reproducción asistida de 2016 realizado por la Sociedad Española de Fertilidad, un 4’4% de los tratamientos de reproducción asistida indicados con ovocitos propios fue de mujeres sin pareja masculina.
¿De dónde vengo?
Uno de los momentos que suele generar más inseguridad a las madres es cuando el niño hace preguntas sobre sus orígenes. Los expertos identifican los 3 años de edad como el momento perfecto para empezar a desvelar los orígenes al niño. Es importante transmitir con naturalidad, adaptando nuestro lenguaje para que pueda entendernos, que se trata de un niño muy deseado por su madre y que su gestación ocurrió gracias a la ayuda de otra persona.
También existe una gran variedad de cuentos para explicar al niño sus orígenes. De esta forma perciben transparencia en el relato y seguridad en sí mismos, entendiendo que es algo que no hay por qué ocultar. Para esto es aconsejable realizar un trabajo propio individual sobre los miedos y prejuicios en torno a la historia que le vamos a contar. Es decir, ir practicando cómo se afrontará este momento desde el nacimiento del niño.
Apoyo psicológico para madres solteras por elección
Este grupo difiere del resto de personas que acuden a reproducción asistida ya que, en principio, no presentan un problema de fertilidad. Pero es importante destacar que ser madres soltera por elección exige de un esfuerzo extra. Esto incluye el nivel económico: la economía familiar depende exclusivamente de ellas y la conciliación con lo familiar se complica, al no contar con una pareja. En estos casos se evalúa el estado psicológico de la mujer, su red de apoyo y las expectativas con respecto al tratamiento de fertilidad.
Además, las técnicas de reproducción asistida requieren habitualmente varios intentos hasta conseguir el embarazo. La necesidad de recibir ayuda ha llevado a la creación de diversas asociaciones donde otras mujeres en la misma situación ofrecen una red de apoyo y comparten este momento vital.
Reacción social a la maternidad en solitario
Aunque este modelo de familia existe desde hace varios años y cada vez son más las mujeres que lo eligen, aún existen reacciones de sorpresa y rechazo en nuestra sociedad. Se sigue considerando el modelo de familia convencional, es decir la familia formada por una padre y una madre como “el mejor modelo de crianza” para un niño. Diversas investigaciones realizadas con madres solteras por elección y sus hijos, demuestran que no es necesaria la presencia de un “padre” para el bienestar psicológico y emocional del niño. Pero no olvidemos la importancia de desvelar al niño sus orígenes con transparencia y naturalidad.
Las asociaciones de madres solteras por elección permiten que los niños y sus madres puedan crecer observando modelos familiares similares al suyo. En España existen principalmente dos asociaciones con estas características:
Además, Eva María Bernal y Rosa Maestro han hecho pública su historia de maternidad por reproducción asistida sin pareja en sus páginas web. Estas dos mujeres pueden inspirar a otras que estén pensando en esta opción para formar una familia.
Sin duda, afrontar la maternidad en solitario requiere mucha valentía. Si estás pensando en ser madre soltera por elección, tienes dudas o deseas recibir apoyo psicológico, no dudes en contactar con el equipo de ifeel.
