Quizá te sientas un poco cansada, incapaz o perdida. Eres una estudiante universitaria que se esfuerza para encontrar la energía para solicitar -de nuevo- otro centro de prácticas o eres una profesional experimentada tratando de reunir la voluntad para ir al trabajo por millonésima vez. Eres una persona mayor con la intención de levantarte de la cama o ¡no eres ninguna de esas cosas! Quieres convencerte de que vas a empezar a ir al gimnasio. Quieres ser una mejor madre. Quieres subir una montaña. Aunque tu montaña no sea literal, todo el mundo siente, alguna vez, que tiene que subir una montaña y necesita un poco de motivación para llegar a la cumbre.
Sigue adelante
A lo largo de la historia de la humanidad, personas de todo tipo han buscado fuentes de motivación. Afortunadamente, la han encontrado en diferentes lugares. Eso sí, a menudo donde menos lo esperaban. Sin embargo, en este caso, te lo ponemos fácil: aquí tienes cinco citas motivadoras de cinco triunfadores excepcionales. Esperamos que, después de leer la última palabra de este artículo, te sientas con más energía para perseguir tus sueños.
La carismática actriz americana Lucille Ball tuvo una carrera larga y variada en la industria del entretenimiento. No solo protagonizó películas en la gran pantalla, sino que también creó sus propios programas y fundó un estudio de televisión. ¿Cómo consiguió hacer todo esto? Solía tener este refrán en mente: «Cuanto más haces, más puedes hacer«.
Su intención era muy clara, pero esto no quiere decir que su actitud fuera fácil de poner en marcha. Para ello, puede resultar de ayuda recordar las palabras que escribió el famoso autor Mark Twain: «El secreto de seguir adelante es empezar«.
Si estás buscando la razón para levantarte del sofá, apagar las reposiciones de I Love Lucy y comenzar a mejorar tu vida, aquí la tienes: ¡nunca vas a conseguir un cambio si no empiezas a hacer algo!
A lo largo del camino al éxito probablemente te encuentres con algunas dificultades. Puede haber etapas duras en las que sientas que tienes poca suerte. Eres humana, vas a fallar pero, tal y como dijo Winston Churchill, «Si estás atravesando un infierno, sigue caminando«.
Winston Churchill fue un hombre que tuvo que ver cómo las ciudades de su país se quemaban y sus compatriotas morían, pero siguió adelante sin rendirse. Sus palabras motivadoras jugaron un papel imprescindible para animar a sus soldados a continuar luchando (y, finalmente, vencer).
La acción es lo que cuenta
En medio de los días más oscuros y las batallas más desoladoras, es posible que no supiera cómo seguir, pero ¡hizo lo que tenía que hacer porque sabía que tenía que hacerlo! De forma parecida, la famosa piloto Amelia Earhart probablemente no sabía qué estaba haciendo cuando llegó a ser la primera mujer que voló sola a través del Océano Atlántico. Tuvo que describir su propio rumbo, abrir su propio camino. Y lo hizo.
Explicó así su método revolucionario: «La manera más eficaz de hacerlo, es hacerlo«. Cruzó el Océano Atlántico en un avión pequeñito, cientos de metros por encima de una extensión de agua de hasta 5.000 kilómetros de ancho.
No todos somos líderes de naciones en guerra ni aviadoras pioneras, pero sí, todos nosotros tenemos nuestras guerras que vencer y nuestros océanos que navegar. Aun si te sientes pequeña en comparación con algunos de los nombres más destacados a lo largo de la historia, puedes seguir el consejo que William James, el padre de la psicología americana, nos dejó: «Actúa como si lo que haces marcara la diferencia. Lo hace.»
Tienes valor. Tu vida importa y tienes un propósito. Lo que haces influye en las personas de tu alrededor, aunque no sea inmediatamente. Le sujetas la puerta a alguien y ella le sonríe a una desconocida, que a su vez se siente más dispuesta a dar dinero al pobre artista callejero que crea música bonita en la esquina. No estás solucionando exactamente la pobreza mundial pero, por otro lado, tampoco no estás no solucionando la pobreza mundial.
Cinco ejemplos motivadores
William James sabía un par de cosas sobre cómo mejorar el estado de ánimo de la gente. También lo sabían los demás: Mark Twain, cuyas palabras han cautivado al público de multitud de países; Lucille Ball, cuyos programas de televisión llegaron a miles de familias alrededor del mundo; Amelia Earhart, que recorrió gran parte del mundo en avión y Winston Churchill, uno de los líderes mundiales más importantes del siglo veinte.
Si estas citas de personajes muy respetados te han dado el subidón que estabas buscando, ¡nos alegramos! No obstante, si todavía estás en un momento de tu vida en que realmente te sientes triste, si estas citas motivadoras no han levantado tu estado de ánimo, te recomendamos que consideres buscar ayuda profesional. Consulta a un psicólogo. Habla con cualquier miembro de nuestro equipo en ifeel. ¡No te sientas avergonzada! Después de todo, en las sabias palabras del psicólogo principiante Charlie Brown, «Pedir ayuda no es de débiles; es un buen ejemplo para saber cómo cuidar de ti mismo».
